viernes, 10 de abril de 2015

Videojuegos



Primera entrada del 2015: videojuegos. La imagen que he puesto es del afamado juego "Mass Effect 3" (está dentro de los mejores para mí) y que probablemente muchos ya conoceréis (así me ahorro un análisis). Bueno, a lo que iba. En esta entrada hablaré del canal de un amigo que empezando en eso del "youtuber" (o como se escriba).


Y sin más dilacion, damas y caballeros, os presento a Llednar10. Os paso su propia descripción:

Gameplays, longplays, let's plays, walkthroughs, reviews, sorteos, discusiones... ¡todo sobre videojuegos de la mano de Llednar10 en YouTube!

Llednar dispone de un canal en YouTube dedicado a los videojuegos, los cuales prueba desde la comodidad de su casa y a través de la plataforma de Sony, Play Station 4 (PS4). En el canal graba mientras juega a la vez que los comenta; por ahora lleva unos 25, centrados principalmente en cinco juegos:

  • Final Fantasy Type-0: sobre este juego ha subido una guía dividida (por ahora) en tres capítulos.
  • Final Fantasy XV (demo): aquí nos muestra a grandes rasgos cómo movernos, armas y demás cosas guays del juego.
  • Pro Evolution Soccer 2015: creación de personajes y algunos partidos para ver las posibilidades que ofrece el juego.
  • Gran Theft Auto V: aquí se nos muestra de nuevo la dinámica del juego a traves de diversos capítulos en los cuales, además, nos va comentando sus andaduras por la pacífica ciudad de Los Santos.
  • Minecraft: sobre este juego hay sólamente dos vídeos, en los que nos hace un tutorias de cómo hacer un mapa multijugador estilo "Los Juegos del Hambre". 

A mi parecer, algunos vídeos son un pelín largos, y por gustos, preferiría muchos más sobre Minecraft (juego del que estoy enamorado por las posibilidades infinitas que ofrece), pero aun así, lo que está haciendo es digno de mención. 

También dispone de un perfir en Facebook, el cual os dejo en el siguiente enlace: "pincha aquí". Eventualmente lo va actualizando con los nuevos vídeos que va subiendo.

Y por hoy, esto es todo. Supongo que iré subiendo más entradas a lo largo del año, de este estilo.

viernes, 21 de noviembre de 2014

101

Entrada número 101 (y creo que a este paso, la única de este año). 
 
Buff... hace mil que no escribo nada, pero creo que este blog ya cumplió su función hace tiempo. Lo utilizaba para desahogarme y, de vez en cuando, para subir alguna chorrada que otra (o momentos de inspiración). También me bindó momentos de "programación" cuando ates de que existiesen los fabulosos "módulos", yo me abría la cabeza para entender los códigos HTML y poner el blog "bonito". Pero bueno...
 
También este blog, y sus no tan periódicas publicaciones me permitieron ponerme en contacto de nuevo con personas que en un momento fueron importantes para mí, pero con las que perdí la palabra y... bueno, más cosas. En un juego raro de "me gustan tus entradas" y "y a mí las tuyas", y meterme en su blog a indagar un "¿quién podrá ser?", se fue forjando de nuevo una especie de puente para volver a reunirnos y tratarnos como personas... creo que se me va la cabeza un poco... Pero bueno, al final fue un "¿eres tal?" y esa persona "sí"; y yo en plan "hostia, qué guay". Y hasta hoy, puedo decir que podemos hablar con tranquilidad.
 
Otra cosa de que publique apenas nada es que mi vida ha girado una cosa loca (mi dialéctica hoy está "pauper pauper"). Apenas si tengo tiempo para mí entre acabar la carrera y demás cursos, y ello implica menos tiempo para publicar. De hecho, ahora debería de estar calentándome la cabeza con sintaxis inglesa y no escribiendo esto, pero no hay muchas ganas... T_T Por lo demás, mi vida va viento en popa (aunque no se ni por qué lo escribo, si nadie me lee...) y con algunos proyectos en desarrollo.
 
Y para acabar esta entrada chorra, me estoy planteando seriamente darle pasaporte al blog para finales de este año. O eso, o darle un cambio radical de aires, conservando el nombre, pero cambiendo la temática de "blog de desahogo" a "cualquier otra cosa que no me de tanta pereza escribir".
 
Y por hoy (y creo que este año), eso es todo. Ale, hasta luego.

viernes, 22 de febrero de 2013

American Cookies

Tras los exámenes y con ganas de que este diario en el éter (blog) caiga en desuso, he decidido ir transcribiendo algunos de mis pensamientos respecto a temas de actualidad. El que hoy ocupa mi atención, y haciendouna metafórica (usad imaginación) referencia al título de la entrada, voy ha hablar de "mi aflicción como filólogo": los extranjerismos.

Bien es cierto que estamos en pleno siglo XXI, la era de la información (muchas veces no contrastada y/o manipulada), con la globalización inundándolo todo, y con un intercambio lingüístico hasta nunca visto. Esto hace que los países crezcan y se desarrollen, y que los indivíduos de a pie, es decir, nosotros, tengamos acceso a miles de ofertas, palabras, ideas, recetas, etc. que están haciendo que cambie nuestro punto de vista, y por ende (y la parte que me interesa) nuestro lenguaje.

Antes, de pequeño, yo iba con mi madre a la tienda de barrio o al mercado a comprar magdalenas (a veces rellenas de chocolate), galletas con chocolate, gaseosa o harina y demás ingredientes para hacer un bizcocho. Algunas tardes íbamos a una cafetería, donde me pagaban un batido de fresa y, con suerte, un trozo de tarta de queso (aunque la que hace mi madre le pega patadas a las demás). 

Bien, hasta ahí, todo parece normal. El problema radica en que hoy en día, la mayor parte de esos términos han cambiado, o están siendo cambiados por las corrientes lingüísticas. Me explicaré cambiando el texto de antes:

Antes, de pequeño, yo iba con mi madre a la tienda de barrio o al supermercado a comprar muffins, cookies, gaseosa o harina y demás ingredientes para hacer un bizcocho. Algunas tardes íbamos a una cafetería, donde me pagaban un batido de fresa y, con suerte, un trozo de cheesecake (aunque la que hace mi madre le pega patadas a las demás).

Bien, quizá esté forzando demasiado el ejemplo, pero la idea está clara. No entiendo por qué ahora, y a causa de modas, la mayor parte de la gente mainstream se deja influir (que no influenciar) por extranjerismos tales como parking, cookies, muffins, marketing, e-mail, OK entre otros por sus referentes en español que serían "aparcamiento", "galletas", "magdalenas", "mercadotecnia", correo electrónico" y "vale/perfecto/de acuerdo".

Reconozco que tengo algunas inclinaciones puristas respecto a la lengua, pero es ahora cuando, gracias a mi carrera, me doy cuenta de la riqueza de nuestro vocabulario y cómo, en función de las modas, éste va degenerando, cambiando y adoptando términos que ya existen en español. Y lo peor de todo es que lo permitimos... 

Este punto de vista es un tema medianamente recurrente en nuestros cafés entre clase y clase. Unas lo defienden; otras lo critican; unas terceras intentan dar un punto de vista neutral (en mi grupo filológico imperan las chicas). Al final, casi siempre llegamos, o en todo caso llego (pues siempre empezamos a divagar) a la misma conclusión: las modas y la mayor parte de la gente, es decir, las corrientes, son las que hacen que una palabra aparezca, desaparezca, se asiente o no en nuestra habla, pero depende de nosotros como indivíduos incorporarla o no a nuestro registro idiomático y utilizarlas según convenga.

En fin, supongo que la próxima vez que vaya al hiper de shopping, me acercaré a la sección "galletas y demás" para comprar las famosas American Cookies que, en el dorso, pone que han sido hechas en Bilbao (que de americano, poco poco). Regresaré a casa y cuando me pregunten qué he comprado, responderé "galletas de chocolate hechas en Bilbao". Y cuando me pregunten extrañados el por qué de tan exquisito pero raro manjar, o el por qué de galletas bilbaínas, les responderé que son las comúnmente conocidas como American Cookies.

jueves, 17 de enero de 2013

Renovación.

Recién operado, y tras un día de convalescencia, retomo mis clases y mis estudios con unos cuantos puntos en la parte derecha de mi cara, y con una bonita venda con esparadrapo sobre ella. Renovado y con dolores, no se puede ser perfecto, escribo la primera entrada del año, y viendo las anteriores, espero no sea la última. 

Bien es cierto que el año pasado escribí poco o nada, no nos engañemos, pero fue un año de tantos cambios que apenas si me quedaba tiempo para desahogarme. Y pasando de propósitos de año nuevo, y de memeces del estilo, me dignaré a decir que con suerte y algo de empeño, intentaré volver a darle lustre a este blog, que más que un muro parece una esquela.

Sin más dilación, me despido. Supongo que no volveré a meter entradas "decentes" hasta  mediados de febrero. Hasta entonces, un saludo.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Perdido




Es extraño cómo puede sentirse uno cuando escucha ciertas canciones; cuando le pones banda sonora a tu vida en un momento. Cómo esas melodías sacan tus sentimientos más profundos a la luz en soledad; cómo evocan recuerdos y cómo ponen sonido a posibles eventos en el futuro...

Es bello y aterrador por igual. Y a veces, uno no sabe cómo encajar lo que siente por esos breves cinco minutos de melodía, pues si son eventos del pasado, ya poco se puede hacer. Mas si es un tema relativamente recurrente, que de vez en cuando, y cuando menos te lo esperas, aparece revoloteando en tu mente; un tema ya tratado en el pasado, pero con cierta vigencia en el presente; un tema que afecta al futuro, quizá no inmediato, pero sí importante en el tiempo, hace que uno se sienta perdido...

Quizá esa es la palabra: perdido...